El 18 de febrero del 2006 el gobernador Ney González se reunió en el aeropuerto de Tepic con el candidato del PAN a la Presidencia de la República, Felipe Calderón. Le presentó una versión sintetizada del Plan Estatal de Desarrollo.
Ya como presidente electo, el 24 de agosto, Calderón y Ney volvieron a conversar en la Casa de Visitas de Nuevo Vallarta. Y el 11 de septiembre, en el Mayan Palace de Nuevo Vallarta, Ney fungió nuevamente como anfitrión de Calderón, ya investido como Presidente de la República, durante la 35 reunión ordinaria de la CONAGO, un encuentro de alto nivel político por la presencia de casi todos los gobernadores del país, en el que el mandatario nayarita mostró sus dones de operador político. En los hechos, fue un espaldarazo plural de los Ejecutivos locales al nuevo inquilino de Los Pinos.
A diferencia de otros gobernadores del PRI de línea ortodoxa, Ney ha tejido una postura pública de diálogo y respeto al Presidente, acreditada en innumerables discursos y reflejada en encuestas recientes, como la de Liébano Sáenz. Es una forma de aceitar la relación con el Gobierno Federal que ha dado resultados.
Frente al escenario nacional de crisis en la relación de Calderón con Marcelo Ebrard, por ejemplo, o la imposibilidad que tienen hoy el Secretario de Gobernación de planchar acuerdos con la nueva Legislatura, perfiles como el de Ney González resultan valiosos para el partido en el poder, en este caso, el PAN.
“DAME CHAMBAS, TE PRESTO MI VOZ”
De ahí que no se entiendan de plano las críticas –públicas y privadas- que ha tenido el dirigente panista Rodolfo Pedroza hacia el gobernador.
¿O, para quién trabaja el tal Pedroza? Si revisamos con quién ha concertado en estos días algunas exitosas recomendaciones para darle chamba a sus allegadas, podríamos creer que no habla por el panismo nayarita, sino que presta su voz –en pago- para ajustes de cuentas extra-partidistas.
Desde el principio del sexenio Ney ha sido generoso con los cuadros que profesan el credo del PAN. Prácticamente la SEDECO, a guisa de ejemplo, es hoy una cuota de poder para ellos.
Recientemente, en plena campaña, el mandatario tuvo un detalle especial para con Ivideliza Reyes en un delicado asunto familiar. Y ni qué decir de la excelente relación que ha dispensado a Rita María Esquivel, delegada de SEDESOL. Y hace apenas una semana, los elogios de Ney a la forma de trabajar del FOVISSSTE en Nayarit (que bien lleva Efrén Vera) fueron un generoso acto de cortesía política hacia su otrora contrincante en la arena política, Manuel Pérez Cárdenas.
Los obuses soltados por Pedroza son una tentadora invitación para que Ney cambie su forma de tratar a los cuadros panistas. Claro, Ney González se mantendrá en esa línea de respeto a Calderón, a los delegados federales y a la mayoría de los distinguidos cuadros locales del PAN.
Sería injusto que la nada institucional palabrería de Pedroza tuviera una reacción contra los intereses de los panistas nayaritas, pues el dirigente no habló por ellos, ni siquiera por él, sino que –como muñeco de ventrílocuo- prestó su voz... a un priísta…
DE BUENA FUENTE: El diputado Ángel Castro se estrenó como sicario, o remedo de sicario. Apedrozado dirige sus misiles declarativos contra el OFS, en vía de revancha ajena. Lo penoso del asunto es la materia de su inconformidad: culpa al ente auditor de que en la oficina del alcalde de Xalisco ¡hay unas goteras!
Que bueno que no hay a nivel local una sección en los noticieros como la que tiene Televisa los viernes por la noche “Las mangas del chaleco”, porque este legislador sería cliente distinguido.
Vaya temas de agenda que trae el señor Castro, como si no hubiera problemas en Nayarit se dedica a ventilar ocurrencias con un simplismo que ofende a su Legislatura. Necesitaba un pretexto para írsele al cuello –por encargo- a Salvador Íñiguez y lo encontró en una nimiedad. La verdad es que el enfoque capacitador que el experimentado economista le está dando al OFS viene a llenar un tremendo vacío en la actividad de los gobiernos municipales.
DE BUENA FUENTE 2: Con un panel que indujo el debate a posturas adivinables, una tele-encuesta arrojó que el 92 por ciento de los televidentes está en contra de la ratificación de los magistrados cuyo cargo concluye en una semana más.
Los panelistas se ensañaron. Claro, se ve que su corazoncito late por ostentar una de esas dos posiciones. Manejaron argumentos francamente ridículos, incluso ofensivos, como el de la edad de Germán Rodríguez.
Ignoro si detrás de este ejercicio mediático de linchamiento estuvo el Poder Legislativo, institución que –de la mano de Manuel Salinas, su Secretario General- ha acreditado en los hechos su desaseo para operar la novación del Pleno del Tribunal Superior de Justicia.