miércoles, 28 de marzo de 2012

¿Por qué callan los funcionarios?


En esta época en que las redes sociales llegaron para quedarse –Gisela Rubach dixit- no es conveniente guardar silencio cuando un tema se mediatiza. Callar es conceder.
Saco a flote esta reflexión por la falta de respuestas que ha habido frente a un tema que se socializó en días pasados dos de los medios impresos más importantes de la entidad: Meridiano y Realidades.
Esta es la historia: El 29 de febrero el diputado Leopoldo Domínguez solicita por escrito a las autoridades estatales información sobre el programa denominado “Farmacias de la Gente”.
En concreto pregunta cuál es la dependencia que opera el programa, la partida que se afecta con la compra de medicamentos, la licitación efectuada –en caso de que así haya sido-, y el tratamiento que se le da a las utilidades, en caso de que las hubiese. Nada del otro mundo pues.
El tema fue deficiente o nulamente abordado por quienes debieron haber esclarecido dudas una vez que se hizo pública la gestión del diputado Domínguez. Mas allá del comentario del gobernador sobre este tema, nadie salió al quite para aclarar las dudas que –ahora- son compartidas por muchos.
Ayer en el muro del diputado panista -y exsecretario de Salud- se gestó un polarizado debate sobre el tema; obviamente, ante las dudas no aclaradas, los argumentos surgen de la pasión. Al final los vacíos de información permanecen y los involucrados solamente hacen un ejercicio de catarsis virtual.

PORTALES OFICIALES INCOMPLETOS
Busqué ayer en las páginas web de algunas dependencias las características de este programa; sin embargo no encontré datos esclarecedores, de hecho, nada.
Me parece que si en su momento los funcionarios correspondientes -¿La Secretaria de Salud? ¿El titular de Desarrollo Social?- hubiesen atajado la bola de nieve a tiempo, no hubiésemos llegado a estas instancias en la que una simple solicitud de información (información pública por cierto, que en teoría debería estar en los portales web) se convirtió en un round con tintes políticos, con el correspondiente desgaste para sus protagonistas.
Imagínense ustedes el gran efecto de imagen que hubiese tenido este expediente si en su momento algún colaborador de Roberto Sandoval le hubiese dicho al diputado Domínguez: “Toda la información que usted solicita está en las páginas web oficiales, al alcance de un click”. Pero bueno, aceptemos que lamentablemente para el joven gobernador, la transparencia no es una fortaleza de su gabinete.
Lo cierto es que percibo que muchos funcionarios actuales tienen deficiencias para interactuar en medios y redes sociales; gustan del confortable anonimato de sus oficinas. Despachan a la antigüita, pues. Y es así que cuando no queda de otra, tiene que ser el mismo gobernador el que salga al ruedo a hacer la faena.

DE BUENA FUENTE: En contraste, el Secretario de Turismo, Raúl Rodrigo Pérez sacó ayer varios conejos de la chistera al acercarle al gobernador una serie de acciones de promoción que marcarán un contraste claro con el sesgo que le dio Ney González a la promoción turística, es decir, que Nayarit no sea solamente Bahía de Banderas. Podemos adelantar que habrá un consenso muy favorable a nivel ciudadano, pues la preeminencia que tuvo el municipio 20 en el sexenio pasado llegó a molestar a muchos ciudadanos de otros municipios.

Twitter: @ehq