lunes, 1 de noviembre de 2010

IPE: Renovación en lo oscurito

Hace algunas semanas en el esplendido restaurant argentino Puerto Madero, en el DF, se cocinó el renacimiento del Instituto Político Empresarial (IPE) del PRI. Rafael Ranero, el Presidente de este ente a nivel nacional, pactó con el grupo de hombres e negocios que dominan algunas dependencias clave en el gabinete estatal y que operan el membrete Consejo Empresarial de Nayarit.

Vía redes sociales mantuve comunicación con Ranero; le dije que el IPE podría constituir un puente con el sector privado nayarita, siempre y cuando le tomaran el pulso a éstos, sin que se gestara una imposición y se le endosara sectariamente, al estilo de cuando se le entregó la Secretaría de Desarrollo Económico a este mismo grupo, en septiembre del 2005, con pésimos resultados.

Ranero me respondió como político: “Mira, voy a mandar a Vicente Gutiérrez Camposeco, expresidente de CANACINTRA, a hablar con los personajes más fuertes de allá, para que haga un buen diagnóstico de los mejores perfiles”.

LA EXCLUSIÓN, UNA VEZ MÁS

Obvio, nada de eso ocurrió. Al estilo de estos tiempos, en lo oscurito, un grupo de empresarios sesionó en privado el jueves pasado. Armaron un escenario de “tamal amarrado” incluyendo dos declinaciones. Y tan tan. Habemos nuevo Presidente del IPE.

Uno de los asistentes al evento me confió con sorna: “Parecía asamblea de proveedores sexenales”. Lo cierto es que muchos empresarios que militan en el PRI, y que financian campañas y candidatos, ni por enterados se dieron.

En unos 5 meses más el PRI entrará en un momento de acuerdos y negociaciones para impulsar candidaturas. Si Griselda Esparza calca el esquema con el que se renovó el IPE el resultado se puede vaticinar: A despacharse con la cuchara grande. Es decir, tres para mi, uno para ustedes, o algo así.

Y el menos culpable del desaseo con el que se “eligió” a la nueva mesa directiva del IPE es su nuevo presidente es Alejandro Galván, un hombre dinámico, quien gusta del diálogo, y que ahora tendrá que remar contracorriente para legitimarse sobre la marcha, cuando pudo haber llegado si los empresarios de confianza en este sexenio hubiesen optado por actuar en este expediente con apertura, transparencia e inclusión.

Las señales que decodifican los aspirantes a cargos de elección popular no deben ser buenas, pues si como decidieron conformar el IPE van a resolver las candidaturas en el 2011, entonces las escisiones y contracampañas tendrán su germen en el mismo PRI.

DE BUENA FUENTE: Adjetivos muy favorables se comentan en los SEPEN de Raúl Gutiérrez, el nuevo Secretario de Hacienda estatal, exadministrador de esa dependencia. Le atribuyen buena capacidad de gestión y una actitud para resolver problemas que suele no ser un atributo de quienes manejan los recursos públicos. Esperemos que mantenga esa tendencia en su nueva –y grave- función.