- Mal ambiente para diputados federales del PRI en medios y redes sociales
- A diferencia de Roberto Sandoval, ni Roy ni Gloria practican relaciones públicas
- Cota, Gianni y Saldate, en cambio, sí se acercan a líderes de opinión
- Eloy García, hijo de Francisco García Villela, reapareció haciendo activismo político el día del niño
El reciente episodio
protagonizado por la diputada federal Gloria
Núñez (un video del Canal del Congreso la muestra con severos problemas de
lectura a la iniciativa de reforma al artículo 27 constitucional) sirvió para que
los usuarios de redes sociales manifestaran críticas al por mayor, tal y
como lo hicieron en semanas pasadas con Roy
Gómez por su terrible video entrevista con el portal ADN Político.
En ambos casos hubo un
hallazgo interesante: el mal ambiente que tienen los legisladores del
PRI con los líderes de opinión tanto en redes sociales como en medios de
comunicación formales.
Columnistas, caricaturistas
y polemistas amateurs en Facebook y Twitter se dieron gusto haciendo cera y
pabilo con Roy y Gloria. Una gran cantidad de usuarios
de la red secundaron las críticas iniciales confirmando una bola de nieve
gigantesca que sirvió para hacer destrucción de imagen.
Es decir, como buenos
debutantes, Roy y Gloria llegaron a cargos que
tradicionalmente se asignaban a personajes con cierta carrera de partido y con
algunas experiencias previas en cargos de elección menores. Al brincarse el escalafón,
ambos están dejando en evidencia que su etapa formativa quedó incompleta, pues
es claro que desconocen los códigos no escritos que sí aplican otros personajes
de la política nayarita.
El senador Manuel Cota es un buen ejemplo
del político formado al estilo clásico. A diferencia de los diputados
federales, hace un muy adecuado uso de las relaciones públicas. Es detallista.
Mi compañero de páginas en Meridiano, Jorge
Enrique González Castillo reconoce que es de los pocos políticos locales
que practican reglas de cortesía. Sabe dar las gracias.
No hace mucho, el
articulista Jorge Vargas López
recordó que en ocasión del velorio de su señora madre, Cota estuvo gran parte de la madrugada acompañándolos, solidario.
Como él, son en realidad
pocos los personajes de la vida pública que suelen hacer un buen uso de las
relaciones públicas. Raúl Mejía,
Salvador Sánchez Vázquez y Armando
García Jiménez por citar a los veteranos, y Gianni Ramírez y Carlos
Saldate de la nueva hornada de políticos locales.
Lo peor del caso, sobre
todo para Roy, es que su líder
político -el gobernador Roberto Sandoval-
es un devoto practicante de las relaciones públicas desde hace muchos años.
Lastimosamente vemos que su buen ejemplo no cunde.
Las relaciones públicas son
una herramienta que desactiva o atenúa las ácidas críticas que los
líderes de opinión pública exteriorizan. Máxime cuando los perfiles de muchos
personajes que han ganado elecciones no da para adhesiones automáticas o
reconocimiento generalizado. Y es imprescindible que en cada situación de
crisis –como las que han vivido Roy
y Gloria- el control de daños prevea
una ronda de acercamiento con quienes ayudan a orientar los veredictos
populares.
Dígamos que para perfiles
como los mencionados (caras nuevas, poca experiencia, frente a la dictadura de
las redes sociales) es absolutamente imprescindible que sepan acercarse a
quienes pueden incidir a favor en contra, a construir o a destruir
imagen.
De mantener ese desdén, la
caída de imagen de los legisladores será un lastre para sus aspiraciones
futuras, ya en 2014, ya en 2017. Si no reaccionan difícilmente podrán estar de
nuevo en una boleta electoral.
DE BUENA FUENTE: Quien reapareció tras varias
semanas de permanecer en el anonimato fue el Secretario de Elecciones del PRI, Eloy García, hijo del defenestrado
exdirector de Tránsito, Francisco García
Villela. Antier con motivo del día del niño repartió regalos en el tercer
distrito local electoral, pues –como sabemos- aspira a ser diputado en el 2014,
algo que se ve improbable por las confusas señales que se enviarían si el PRI
lo postula.
Twitter:
@ehq