Dedicada a los regidores que viajarán a California
Martes de sopor. La red avienta un alud de cifras y datos diversos sobre Nayarit. Desde consejos para conducirse en redes sociales –inspirados en un paisano nuestro-, hasta el breve diálogo que sostuvieron Roberto Sandoval y Carlos Salinas de Gortari en Mérida, pasando por porcentajes de pobreza del estudio recién presentado por el CONEVAL y alguna nota sobre deuda pública.
Hurgo en el ciberespacio para dar con algún detalle inspirador o, cuando menos, un trascendido interesante. No hay mucho. Leo algo sobre el calor que agobiará a Nayarit en este verano. No sé si me sugestioné, pero el caso es que experimenté una súbita sensación de asfixia. Decido ponerle remedio. Un preparado de fresa, con mucho hielo, y a abrir de par en par –como decía mi papá- las ventanas.
Lejos de recibir una refescante ventisca me llega la fragancia descompuesta de un montón de basura en pleno proceso de fermentación. Y el ruido del aleteo de moscas verdes. -¡Carajo!- digo para mí cuando veo el espectáculo. El hedor proviene de una mezcla sin forma de la que sobresalen las semillas de un papayo, unos huesos de mango, cabezas de camarón –por el tamaño intuyo que son los de a $65.00 el kilo- y algo rojo que podría ser salsa catsup.
Es un amasijo desagradable a la vista, pero un bufet imperdible para la plaga de moscas que por ahí rondan. Son parte del decorado urbano de Tepic.
Vuelvo a la red. Y veo el tweet monterrosiano de Jorge Cornejo (@JorgeECornejo): “4 días y la basura ahí sigue”. Lo redactó a las 12:27, casi al mismo tiempo en que yo –iluso- quise mitigar el calor con algo de viento.
¿Y LOS REGIDORES, PARA QUÉ SIRVEN?
En Tepic la gente saca la basura por las tardes; otros por la noche. En una ciudad normal la gente duerme con la esperanza de que al día siguiente las bolsas multicolores –negras por lo común- hayan desaparecido. En Barcelona, en el verano del 2007, disfrutaba ver cuando mi sobrino Iván corría al balcón para ver al camión que recogía los desperdicios de la gente, separados en casa en bolsas de basura orgánica e inorgánica. El vehículo propiedad del Ayuntamiento catalán no solo recogía con cuidado las bolsas, sino que además aplicaba un líquido desinfectante para aniquilar los efectos insalubres de los fluidos pestilentes.
Aquí es común el desaliento matutino de los vecinos cuya jornada extramuros inicia, en los últimos meses, con el zumbido irritante de las moscas en los cerros de basura.
Un click en la laptop y el monitor me devuelve justo lo que necesitaba para redondear un juicio sumario sobre las autoridades municipales. La regidora Jassive Durán nos dice a los contribuyentes que “sería imperdonable rechazar a la invitación a California”. Así como ella, muchos regidores nayaritas –y alcaldes- alistan pasaportes y visas para viajar a la Feria de Nayarit en aquel estado norteamericano. Son una plaga que gravita sobre las finanzas municipales. Dejaron de representar a los vecinos –como Jorge Cornejo- y se dedican a consumir recursos que bien podrían servir para reparar los carros recolectores.
Espero que mañana miércoles pueda despertar y decir que la basura ya no estaba allí.
DE BUENA FUENTE: Saludable es que se fusionen las Secretarías de Hacienda y de Administración, y en perspectiva, será importante ver que otros movimientos hará Roberto Sandoval para moderar la nómina de mandos medios y superiores del Poder Ejecutivo, pues varias Secretarías creadas en los últimos meses carecen tanto del presupuesto, como de la estructura idónea para operar. Varios trascendidos apuntan a la fusión de las 3 dependencias del ramo educativo en una sola (SEPEN, SEB y SEMSSICYT). Y habrá que poner en la báscula la pertinencia de mantener funcionando a la Secretaría de Desarrollo Social y a la Secretaría del Trabajo, entre otras de ese y menor rango.
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