La pésima operación para sacar adelante la Reforma Electoral generó varios daños colaterales. Tres de éstos son dignos de comentar.
PRI vs PRI
Primero, muestra en todo su esplendor al PRI dividido, al PRI de carne y hueso que nada tiene que ver con el discurso reiterado de Griselda Esparza su novel presidenta. La reveladora votación en el Cabildo de Tepic para rechazar la modificación constitucional impulsada por los diputados priístas es una exacta radiografía de cómo anda el partido mayoritario.
Incluso, algunos otros detalles simbólicos nos sugieren la idea de una vertiente de la “Ola Roja” –aparentemente numerosa- que simpatiza con el proyecto político de Roberto Sandoval, algo que se sospechaba pero que no había tenido oportunidad de materializarse. Varios regidores del tricolor no dudaron en oponerse al lineazo, generando disgusto en los conductores de esta corriente política que domina Congreso, Ayuntamientos, el Poder Judicial y la mayor parte de los puestos en la administración pública: Bueno, hasta exabruptos para el anecdotario político surgieron, como el pleito familiar enderezado por la diputada federal Cora Cecilia Pinedo contra una tía regidora que brincó el martes oficialmente ya, de la ola roja a la ola blanca.
El caso es que se esta semana se volvió a pasear el fantasma del 2009, ese de la discordia y las contracampañas internas. ¿O qué acaso nadie recuerda que el “fuego amigo” le costó al PRI 2 diputaciones federales?
Lo peor del asunto, a diferencia del 2009, es que en esta semana se vio una operación política al alimón entre PAN y PRD. Esta alianza de facto puede mantenerse el año que entra. Y miren que el PRI les dio elementos para que se unieran.
2011: PARTO PREMATURO
El segundo daño colateral es el adelanto del calendario. Hasta la semana pasada ninguno de los actores políticos locales habían asumido abiertamente las posturas de confrontación típicas de una precampaña. Sí, todos andaban en labores de proselitismo personal, pero participaban sin problema en la agenda institucional de Nayarit. Recordemos, el lunes 14 de junio –creo por vez primera- todos los aspirantes respondieron al llamado del gobernador Ney González para signar una petición plural de apoyo al gobierno federal.
Tras los zipizapes posteriores, difícilmente habrá oportunidad de que vuelvan a gestarse momentos de concordia, pues los agravios patrocinados por los operadores institucionales –al inducir la modificación de actas de cabildo- dieron el banderazo de salida a la asunción de posturas de campaña.
No se esperaba que el 2011 irrumpiera tan pronto, a 13 meses de la elección. Se ha destrozado el escenario que permitía desarrollar acciones consensuadas para combatir la inseguridad. Que lamentable.
Lo peor de todo es que me parece que el PRI no estaba blindado contra esas muestras de discrepancia política interna. Hay que recordar que la dirigencia estatal mantiene un discurso de unidad que –ante la contundencia de los hechos- debe rehacerse ya. Se adelantaron los tiempos.
NEY Y EL ESCENARIO NACIONAL
El tercer apartado es la incapacidad de posicionar al gobierno local contrastándolo con las pifias de otras administraciones en desgracia.
Justo cuando varios gobernadores del PRI –los de Oaxaca, Puebla y Veracruz- sufren una severa caída de imagen de cara a las elecciones del próximo 4 de julio los errores de varios operadores del régimen dinamitan la oportunidad de que en esta coyuntura se presente Ney González en el escenario nacional con un logro valioso: una reforma electoral consensuada, incluso votada por unanimidad en el Congreso, como parecía hace semana y media.
Gracias a los errores y omisiones se va a pagar, señoras y señores, el costo de oportunidad. De cara a la nación, Nayarit no tiene nada que presumir en esta coyuntura. Las decisiones tomadas sin los análisis de entorno adecuados impiden explotar políticamente este momento.
Ojo, los políticos del régimen debieron haber incorporado en sus razonamientos lo que sucedió en julio del 2009, cuando Nayarit no pudo festejar el claro triunfo del PRI en todo el país debido a que –igualmente por errores de cabildeo interno- este partido óbtuvo el peor resultado de su historia en elecciones intermedias federales, perdiendo 2 de 3 distritos. Bien decía don Jesús Reyes Heroles: “Praxis sin teoría, es barbarie”. Manuel Narváez –y otros- tomaron decisiones a puro pragmatismo, sin la reflexión de coyuntura que era dable. ¡Bárbaros!
DE BUENA FUENTE: En un ambiente institucional donde los pequeños grandes detalles se han perdido –el uso de las relaciones públicas gubernamentales, por ejemplo- conviene aplaudir el tacto de los pocos personajes públicos con aptitud y actitud para tender puentes. Uno de ellos es, sin duda, Sergio Eugenio García, titular del CECAN, quien no solamente da lustre al sexenio con su brillante trabajo, sino que además su gentileza y atenciones lo distinguen frente a un gabinete que olvidó que la forma es fondo.
Sin duda, un buen alumno de Ney González, quien cimentó su carrera política –en gran medida- en un eficaz desempeño como publirrelacionista de su proyecto.