Si en el primer semestre del 2011 la Ola Roja vivía un ambiente de ensueño, en la recta final del año sus propios errores le están acarreando un ambiente social de cuestionamientos. Habrá que ver qué tanto le afecta la cruda posterior al bacanal de basificaciones que tienen a las finanzas estatales en situación de agobio.
Mientras, Roberto Sandoval, mueve sus piezas de cara al 2012, con Roy Gómez como una apuesta clara por el segundo distrito electoral, es decir, Tepic, paralelamente aparece en el panorama local un personaje que, merced a sus nexos con el centro, podría estarle disputando la candidatura al Senado a Ney González: el exdiputado federal Víctor Cánovas Moreno.
Nadie duda que un lugar seguro en la fórmula del PRI para la Cámara alta es Manuel Cota. Y si hace algunas semanas todo parecía indicar que el otro rostro en la boleta sería Ney, ahora parece que este supuesto dependerá de que su decisión de basificar a cientos de fidelizados no le acabe de descomponer su relación con el grupo político del actual gobernador.
Hay que entender el problema de los basificados en su doble dimensión: como un grave problema financiero; y como una violación a los códigos tradicionales de un relevo gubernamental. Hasta donde se sabe, la administración saliente mintió acerca de la cantidad de basificados heredados al nuevo sexenio. Políticamente, un error grave.
¿SE CAERÁ LA CANDIDATURA AL SENADO?
En la nutrida carrera electoral de Ney sólo falta ese blasón: Llegar al Senado de la República. Para ello tendrá que recomponer también sus nexos con la actual nomenklatura del PRI, pues su nombre no apareció ni en las recientes coordinaciones regionales designadas por Humberto Moreira –responsabilidad otorgada a varios exgobernadores-, ni en los 223 nombres de los integrantes de la influyente Comisión Política Permanente del PRI, ni tampoco entre los 11 miembros de la Comisión Nacional de Financiamiento del partido tricolor, y finalmente tampoco en los otros once personajes de la Comisión Nacional de Presupuesto y Fiscalización.
Si al tema de los basificados se le suman otros expedientes que podrían detonar en campañas espontáneas o teledirigidas de destrucción de imagen (deuda pública, concesión de la Arena Cora, concesiones a Constructora Integral NUMEI, costo de la autopista Cruz de Huanacaxtle– Punta de Mita, etc.) las posiciones que la Ola Roja podría negociar con el PRI se verían muy afectadas. Además de un escaño senatorial se detecta que buscarán la diputación federal por el primer distrito para Manuel Narváez Robles.
Habrá pues que esperar cómo reacciona la Ola Roja frente a una aparente crisis en fase embrionaria. Lo cierto es que no se les da la fácilmente ni el diálogo, ni la concertación y –de acuerdo al Gabinete de Comunicación Estratégica, la empresa de Liébano Sáenz- el nivel de confianza social en Ney hasta el mes de septiembre estaba en un punto crítico: apenas contaba con el apoyo de 24 de cada 100 nayaritas.
En fin, veremos cómo opera Ney a corto plazo; pues una de sus fortalezas históricas es su increíble capacidad para reaccionar.
DE BUENA FUENTE: Roy Gómez, José Carlos Ríos Lara y Héctor González Curiel son los nayaritas que integran la selecta lista de 223 miembros de la Comisión Política Permanente del Consejo Político Nacional del PRI. Dos sandovalistas y un representante de la Ola Roja, aunque éste aparentemente ha guardado sana distancia respecto de los líderes de esta corriente política y sus criterios operativos. Hace bien.
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