En Tepic no
hay sociedad civil; en Bahía sí
Organizados, actuantes,
decididos e indignados, los habitantes de San Pancho en Bahía de Banderas han
forjado un movimiento en contra de la colocación de concreto estampado y de las
obras de remodelación de la plaza pública del lugar por no haber sido
consultados previamente por la Secretaría de Obras Públicas. Hacen pues, lo que
no hicimos los aletargados tepicenses cuando la autoridad unilateralmente
destruyó los tradicionales estadios para crear la Ciudad de las Artes.
“A quién le preguntaron? que van a hacer? quieren hacer
un Disney Pancho?”
cuestionó el 17 de enero en redes sociales Eric
Saracho, líder de los inconformes y conocido ambientalista (dirige la
Alianza Jaguar). La molestia de los locales es por la irrupción de maquinaria –un
día antes- para quitar el empedrado y colocar concreto estampado, y retirar
los frondosos árboles de la plaza del sol, al igual que los juegos infantiles,
como parte del programa “Paraísos Nayaritas”. A San Pancho le corresponden 20 millones de pesos de los 84 (inversión bipartita
federal y estatal) que de manera global se calendarizarán con cargo al presupuesto
2011.
Por la parte gubernamental, los
Secretarios de Obras Públicas y de Turismo, Gianni Ramírez y Raúl
Rodrigo Pérez, ya han entablado comunicación con los habitantes del
paradisiaco lugar. El primero anunció una pronta visita y el segundo ha estado
interactuando atinadamente en redes sociales para gestionar una solución. Pérez explicó el lunes pasado que ya
que “no fue posible socializar el proyecto porque si no se perdía el recurso”,
y dejó en claro que los proyectos fueron armados en el sexenio pasado. Lejos de
condenar la reacción popular, este joven funcionario ha elogiado públicamente
el activismo demostrado por los lugareños.
NO AL CONCRETO ESTAMPADO, SI AL
ADOQUÍN
El 27 de enero los vecinos hicieron
llegar a Gianni Ramírez una
solicitud para revisar la propuesta arquitectónica oficial que “carece de
sensibilidad social y ambiental”, con la intención de modificarla. Antes se
dieron a la tarea de conseguir los planos. La molestia es muy grande. Desean,
por ejemplo, que se adoquinen las calles aledañas a la plaza y que no se
instale concreto estampado que es –cito textualmente un posteo de Saracho en Facebook- “caliente, chafa, impermeable, inundable,
sin drenaje pluvial, carísimo, que no da trabajo a la gente local, que limita
el crecimiento y el manejo del drenaje y tomas de agua, que impide el proyecto
de cableado subterráneo y que hace de San Pancho un pueblo de alta velocidad!!!
Peligro para los niños, más accidentes y adiós a los turistas por atropellados
y adios a la paz de la velocidad baja y relajada”.
Piden también que se respete el
arbolado restante en la plaza –ya quitaron algunos- y que se siembren plantas
nativas y no espinosas; que se incluyan juegos recreativos para niños y se
mantenga la cancha de basketbol para jóvenes y adultos; que se prevea la
construcción de un escenario para eventos culturales; que se reduzca el tamaño
de las nuevas jardineras; que se eliminen la pérgola y los espejos de agua –un
imán para los zancudos-; que se reutilice la teja sobrante de una casona para
montar un tejabán; y, que las bancas y contenedores de basuras sean acordes a
los de un pueblo tradicional mexicano.
También rechazan que se permita el estacionamiento dentro de la plaza, y -aunque no quedó consignado en el documento que entregaron en la SOP- han consensuado varios otras ideas, como instalar una fuente interactiva para niños (similar a la exitosísima del Parque La Loma en Tepic) y una skatopista para patinetas.
También rechazan que se permita el estacionamiento dentro de la plaza, y -aunque no quedó consignado en el documento que entregaron en la SOP- han consensuado varios otras ideas, como instalar una fuente interactiva para niños (similar a la exitosísima del Parque La Loma en Tepic) y una skatopista para patinetas.
Además de diversos blogs –en
español e inglés- y de la cobertura amplia de la prensa vallartense, el tema de
las obras en este destino turístico puede monitorearse vía Facebook en un grupo abierto denominado “San Pancho Comunidad
Participativa” que hasta ayer jueves contaba con 180 miembros, 11 fotografías y
7 documentos.
¿Y OMAR REYNOZO? ¡EN MIAMI!
En el poblado Higuera Blanca se
registra otro movimiento social similar al de San Pancho con obras de
remodelación dotadas de 14 millones de pesos. Sayulita y Bucerías son los dos
destinos incluidos en el programa.
Por cierto, en ningún renglón de
redes sociales, blogs y portales noticiosos vi que el nombre del diputado Omar Reynozo estuviera asociado a las
gestiones de sus representados de San Pancho o de Higuera Blanca. Lejos de eso,
el cuestionado galeno se encontraba en Miami tomando parte en un curso de
marketing político.
En Tepic la ausencia de consulta
pública para crear la Ciudad de las Artes no provocó una reacción social
organizada; afortunadamente en Bahía de Banderas, ese autismo oficial sí tuvo
consecuencias. Allá si hay ciudadanos activos. Será un buen reto para un par de
jóvenes profesionistas tan capaces como sensibles, Raúl Rodrigo Pérez y Gianni
Ramírez. Ojalá se logre una solución consensuada.
DE BUENA FUENTE: Esta semana revivió en redes sociales el
Presidente del Tribunal Superior de Justicia; Pedro Enríquez, alentando
la discusión sobre la controvertida reforma al artículo 24 constitucional, que
–aparentemente- pone en entredicho la laicidad del Estado mexicano.
Hace bien el jurista en
mostrarse extramuros, pues conviene que esté en forma para los debates que
–seguramente- irán in crescendo sobre
el Poder Judicial nayarita, toda vez que el año que entra algunos magistrados
buscarán su inamovilidad en el cargo, mientras que amplios sectores sociales y
del foro jurídico seguramente pugnarán por la reducción del pleno de 17 magistrados.
Por cierto, habrá que ver
si el magistrado Enríquez –un hombre inteligente, sin duda- contemporiza
su visión del mundo e inicia un proceso de deslinde político, pues convendría
una revisión al organigrama para mandar señales al exterior de que la Ola Roja
no manda en ese ente.
Twitter: @ehq